La desidia merideña ante el arte circense: Un llamado a la reflexión.
Introducimos.
El arte circense, con su amalgama de acrobacias, magia, humor y destreza, ha cautivado a públicos de todas las edades desde tiempos inmemoriales.
Sin embargo, en el estado Mérida, Venezuela, se observa una apatía particular hacia este espectáculo.
La falta de asistencia a eventos circenses, la escasa participación en talleres y la desvalorización del trabajo de los artistas circenses son algunos de los síntomas que evidencian esta desidia.
Factores que inciden en la desmotiación
Desconocimiento: Muchos ciudadanos desconocen el valor artístico y cultural del circo. Lo asocian únicamente con entretenimiento infantil, ignorando la complejidad técnica, la disciplina y el esfuerzo que conllevan las diferentes especialidades circenses.
Falta de promoción: Existe una deficiente difusión de los eventos circenses. La publicidad suele ser escasa y poco efectiva, limitándose a canales digitales, redes sociales, entre otros, que no son efectivos del todo, y muy pocos metodos tradicionales como afiches o perifoneo, sin aprovechar las nuevas nuevas formas de comunicación acertiva.
Precariedad económica: La crisis económica que atraviesa Venezuela ha impactado negativamente en el poder adquisitivo de la población. El precio de las entradas para espectáculos circenses puede ser un impedimento para muchas familias, especialmente las más numerosas o de bajos recursos.
Estigmatización: Persiste un estigma social hacia los artistas circenses, considerándolos como personas de baja categoría o con escasa formación. Este estereotipo, heredado de épocas pasadas, desvaloriza su trabajo y talento.
Infraestructura deficiente: La ciudad de Mérida no cuenta con espacios adecuados para la presentación de espectáculos circenses. Las carpas tradicionales son cada vez más escasas y las instalaciones existentes suelen ser precarias, con deficiencias en cuanto a sonido, iluminación y seguridad.
Consecuencias de la desidia
La desidia hacia el arte circense tiene repercusiones negativas en diversos ámbitos:
Cultural: Se limita el acceso a una forma de expresión artística con un rico bagaje cultural e histórico.
Económico: Se priva a los artistas circenses de una fuente de ingresos y desarrollo profesional.
Social: Se desaprovecha el potencial del circo como herramienta de integración social, educación y desarrollo de valores.
Propuestas para fomentar la motivación
Fortalecimiento de la promoción: Implementar estrategias de marketing innovadoras que aprovechen las plataformas digitales y las redes sociales para dar a conocer la riqueza del arte circense.
Programas educativos: Incorporar talleres y actividades circenses en la formación escolar y extracurricular, sensibilizando a las nuevas generaciones sobre este arte.
Apoyo económico: Implementar políticas públicas que subsidien o brinden acceso gratuito a espectáculos circenses para sectores de la población con dificultades económicas.
Reconocimiento social: Promover campañas que reivindiquen la labor de los artistas circenses y resalten su valor cultural y artístico.
Mejora de la infraestructura: Invertir en la construcción y remodelación de espacios adecuados para la presentación de espectáculos circenses, garantizando condiciones óptimas para el público y los artistas.
Conclusión
La desidia hacia el arte circense en Mérida es un problema complejo que requiere un abordaje integral. Es necesario aunar esfuerzos entre el sector público, privado, educativo y cultural para fomentar la motivación del público merideño hacia esta expresión artística. Solo así se podrá garantizar la supervivencia y el desarrollo del circo en la ciudad, preservando su valor cultural y asegurando su futuro. Palabras clave: arte circense, desidia, motivación, Mérida, Venezuela, promoción, educación, apoyo económico, reconocimiento social, infraestructura.
Por Ricardo Chacón